Desde hacía dos meses Alberto Mario Henríquez Miranda se estaba dedicando al oficio de cobradiario. Había comprado una motocicleta al tío de su esposa para realizar mejor su labor. Sin embargo, en la noche del pasado viernes, dos sicarios acabaron con su vida mientras iba a cobrar un dinero en Villa Katanga.

El hombre de 33 años llegó en su motocicleta Honda XR-150 de color negro y placas DFS – 74E a la calle 50 con carrera 23, en Soledad. La paqrueó y caminó 200 metros a una casa en la que iba a cobrar.

Cuando llegaba a la vivienda, dos hombres lo impactaron cuatro veces: una en la zona del omoplato y otra en la axila izquierda, ambos del lado izquierdo; una más en el abdomen y otra en el lado derecho de la espalda.

El cobradiario fue auxiliado por habitantes del sector y fue trasladado al Hospital Universidad del Norte, donde falleció mientras recibía atención médica.

Henríquez deja cinco hijos: de 15, 10, 8, 3 y año y medio. Vivía en Conidec y era el quinto de seis hermanos.

Las autoridades verificaron su número de cédula en el Spoa y le aparecen dos anotaciones: una por el delito de porte ilegal de armas de fuego y otra por el delito de falsedad en documento público.